Versatilidad de ubicación:
La gran ventaja de este sistema de entrenamiento es que puedes trabajar, prácticamente en cualquier lugar, tanto en gimnasios como al aire libre
Entrenas todo tu cuerpo:
El TRX te permite entrenar todo el cuerpo con las mismas cintas. La mayoría de los ejercicios que realizamos en un gimnasio pueden realizarse -con ligeros cambios- con el TRX. Sólo necesitamos un anclaje al techo o a una pared.
Quemas grasa:
Al implementar una disciplina de entrenamiento en suspensión con un circuito de intervalos, obtendremos, un excelente entrenamiento cardiovascular y quemagrasas.
Te equilibra:
El TRX te permite trabajar movimientos que implican grandes cadenas musculares. Al disponer de menos apoyo que cuando trabajamos de forma tradicional, nuestra sección media debe estar activa. Para estabilizarnos, pasan por él todas las fuerzas que generamos.
4. Trabajas con tu propio peso:
Trabajar con nuestro propio peso corporal, como es el caso del entrenamiento con TRX, nos permite aumentar la fuerza y resistencia muscular, así como tonificar todo el cuerpo. Además evita lesiones, pues nunca nos exponemos a cargar más peso del que podemos soportar
6. Es combinable:
El TRX se puede combinar con implementos como el Fitball, el Bosu o las bandas elásticas, por lo que la variedad de ejercicios que podemos realizar con estas cuerdas, es inagotable.